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domingo, 28 de febrero de 2010

ENTRENAMIENTO PARA PERDER PESO

ENTRENAMIENTO PARA PERDER PESO
Si disminuyes tu ingesta calórica, perderás grasa pero también músculo. Sin embargo, esta pérdida de músculo puede reducirse haciendo ejercicio. Por eso es importante el entrenamiento como parte del programa para preservar el tejido muscular y lograr de este modo que una mayor proporción del peso perdido corresponda a grasa.
Además, si incluyes ejercicios en tu rutina no sólo mantendrás tu tejido muscular, también vas a elevar tu Indice Metabólico en Reposo durante las 10 a 15 horas siguientes a tu entrenamiento. No lo olvides: cuanto más músculo tengas, más rápido será tu metabolismo y más fácil te será adelgazar.
Por eso, para quedarte con un “cuerpo diez”, te recomendamos combinar dos tipos de entrenamiento: Tonificación y Aeróbico a intensidad elevada.
A) TONIFICACIÓN
Para tener un metabolismo elevado, o sea un gasto alto, hay que tener “un motor potente”.
En nuestro caso el motor es la musculatura.
A mayor tono muscular y mayor cantidad de músculo más consumo energético realiza el individuo. Este consumo alto se da no sólo durante la actividad, sino también en reposo, que es lo que más cuenta porque pasamos muchas más horas al día reposando o en situación de baja actividad que entrenando.
Por eso el entrenamiento de tonificación es importante para que tu cuerpo use más grasa incluso cuando estás durmiendo. Para ganar tono muscular lo mejor son los ejercicios de fuerza a intensidades máximas y submáximas, con mancuernas y máquinas de musculación.
Apoyándonos en las investigaciones, la tonificación más efectiva se consigue cuando hacemos de 2 a 3 series de 6 a 10 repeticiones por ejercicio, siempre y cuando sean repeticiones máximas, esto es con una carga tal que no puedas hacer otra más seguida sin alterar la técnica.
B) AERÓBICO INTENSO
El ejercicio aeróbico consigue quemar muchas calorías en poco tiempo, más incluso que el ejercicio de tonificación, por lo tanto es muy recomendable de cara a perder grasa correr, montar en bicicleta, nadar, patinar, remar, etc.
Nuestra recomendación es que hagas de 45’ a 60’ de ejercicio aeróbico, de 3 a 5 veces por semana. Comienza con tareas suaves y continuas y ten en cuenta que lo ideal para activar tu metabolismo, más que el clásico método continuo trabajando en la llamada “zona quemagrasa”, que es un ritmo uniforme de intensidad media-baja, es introducir variaciones y cambios de ritmo, una vez hayas adquirido una base física.
1. Interval training.
Puedes introducir hasta un par de días a la semana de trabajo intenso, con cambios de ritmo. Regula la intensidad en función de la duración del cambio. Puedes hacer cambios desde 1 minuto (al 95% de tus pulsaciones máximas) a 20 minutos (en torno al 85% de tus pulsaciones máximas)
2. Fartlek.
Son cambios de ritmo también, pero con una estructura más libre, adaptándonos a las circunstancias del terreno: puedes ir más rápido en una subida, aflojar hasta el siguiente árbol, acelerar hasta un cruce…
3. Series cortas y cuestas.
Es una variante del interval en la que se alcanza una intensidad superior durante un periodo de tiempo más reducido. La duración no suele superar los 30 segundos por cada fase intensa, con una recuperación que puede ser el doble de tiempo.
4. Cross-training.
El cuerpo se adapta y se acostumbra pronto a las rutinas de entrenamiento, haciéndose muy eficiente cuando “sabe” lo que se va a encontrar. Esta eficiencia se traduce en un menor consumo calórico. Sin embargo si variamos nuestras sesiones introduciendo diferentes deportes y actividades (lo que se ha dado en llamar cross-training) mantenemos el gasto elevado.

Todavía se oye a menudo decir que “correr muy suave, poco más rápido que ir andando, es lo mejor para eliminar la grasa corporal”. No es cierto. La realidad es que correr supone un mayor consumo de grasa (y calorías) que caminar. El mito se origina en el hecho de que a muy baja intensidad la fuente de energía preferida por tus músculos es la grasa, sin embargo olvida el dato del consumo calórico en términos absolutos.
Aunque el porcentaje de grasa consumida sea mayor yendo despacio, las calorías que se queman son mucho menores que cuando se corre más rápido, de forma que el balance global siempre es favorable a la carrera respecto al trote suave.
En un estudio de la Universidad de Québec se mostró cómo un programa de ejercicio aeróbico, con cambios
intensos de 90 segundos al 95% de las máximas pulsaciones, quemaba hasta 3.5 veces más calorías que un programa de la misma duración pero con intensidad moderada.
Una explicación adicional este efecto es el hecho de que el metabolismo de reposo puede seguir acelerado durante horas después de acabar el ejercicio cuando se hace una sesión intensa. Sin embargo el ejercicio de baja intensidad no produce ese efecto de aceleración posterior del consumo.
Por supuesto no podemos dejar de tener en cuenta el nivel físico inicial del corredor, si éste es muy bajo tendrá que empezar a acondicionarse con rodajes muy suaves antes de iniciar sus carreras a ritmo alto.
Este es uno de los mitos más absurdos y con menos fundamento. Los que lo postulan se basan en lo ocurrido con algunos deportistas que dejan de entrenar y engordan, pero esto no tiene nada que ver con que los músculos se transformen en grasa, ya que eso no puede suceder por mucho que se piense que es así. Lo que suele ocurrir es que el deportista está acostumbrado a unos hábitos alimenticios concretos por el alto gasto calórico de su actividad física y al abandonar la actividad o reducirla drásticamente se mantienen esos hábitos o aunque se coma menos no se compensa la diferencia de gasto. El resultado es que poco a poco la persona empieza a ganar peso, pero no porque sus músculos se conviertan en grasa, al revés, estos músculos le permiten mantener un gasto metabólico alto y engordar más lentamente. La persona gana peso porque supera
con su ingesta el menor gasto que ahora realiza.
Salvo que tengas una predisposición extraordinaria a no acumular nada de grasa o tu alimentación sea muy equilibrada, al cabo del tiempo irás ganando peso si tu estilo de vida es totalmente sedentario. 
Pero no hay que olvidar que hacer ejercicio no es sólo ir al gimnasio o correr una hora todos los días, hay mucha gente que no gana peso nunca a pesar de no hacer deporte por su estilo de vida activo y que se conservan delgadas en su madurez. Son personas que van caminando al trabajo, no cogen el coche para hacer cualquier recado, usan las escaleras en vez de los ascensores, hacen labores domésticas en casa o en el jardín, etc.
Lo que está claro es que perder grasa o no acumularla con facilidad es una cualidad que viene asociada a la actividad física de una u otra forma. Si tu deporte favorito es el “sillón ball” y el movimiento “te da alergia” eres candidato/a a criar una bonita barriga o un culo espectacular, además de que tu esperanza de vida se verá reducida respecto a la de una persona activa o deportista. Por suerte nunca es tarde para empezar a moverse, no pienses que porque no has hecho nunca deporte no puedes iniciarte cuando te plazca. El elemento más importante del proceso de pérdida de grasa no son tus músculos, sino tu cerebro y tu fuerza de voluntad.

ALIMENTACION PARA PERDER PESO

ALIMENTACION PARA PERDER PESO
Cuando permaneces inactivo/a, disminuyen las demandas de energía, por lo que las grasas y los hidratos de carbono consumidos en exceso, se transforman en ácidos grasos en el hígado y se almacenan como triglicéridos y fosfolípidos en los tejidos de reserva o en los músculos en forma de pequeñas gotas intramusculares. Es decir, se forman “michelines” alrededor de la cintura en hombres y en la cadera, muslos y
glúteos en mujeres.
Dentro del músculo también existe grasa, principalmente en el músculo entrenado, aunque parezca un contrasentido. En los tejidos musculares de los deportistas se pueden observar pequeñas gotas de grasa, cerca de las mitocondrias para disponer de combustible rápidamente durante el entrenamiento. Cuanto más tiempo entrenas a baja intensidad, mayor es la cantidad de gotas de grasa disponibles para obtener energía, lo que aumenta la resistencia muscular.
Cuando necesitas energía extra, los ácidos grasos se “queman” u oxidan en un proceso llamado lipolisis. Hay dos estrategias para conseguir movilizar la grasa de sus depósitos de reserva: la primera es el ayuno que provoca la liberación de los ácidos grasos del tejido adiposo para que se quemen y suministren energía a los tejidos para mantener la vida sin alimentos.
Por supuesto, no es un método recomendable, es mucho más sano y responsable el segundo método: el ejercicio porque cuando se mantiene la actividad física los ácidos grasos son la fuente principal de energía para el tejido muscular, aún cuando esté disponible la glucosa y el glucógeno almacenado. Con la actividad física, no sólo evitas problemas de salud sino que los resultados en el espejo se notan, porque “afinas” tu silueta sin perder firmeza.
A pesar de la dieta y del entrenamiento, muchos deportistas se encuentran con acúmulos de grasa en zonas del cuerpo casi imposibles de eliminar. Los quemadores de grasa son un arma estratégica para llegar a las grasas y movilizarlas.
Cuidado con las frutas, aun siendo importantes para la salud por el aporte de vitaminas, minerales y fibra, también se convierten en un arma de doble filo ya que algunas de ellas contienen demasiados azúcares que pueden convertirse en grasa si abusamos. Las más indicadas en una dieta serían las frutas como la manzana, el kiwi, la pera o la sandía que tiene un alto contenido en agua.

Es un hecho indiscutible: si comes más calorías de las que gastas ganarás peso, independientemente de la composición de tu dieta. Incluso si tomas menos del 20% de tus calorías en forma de grasas, menos del porcentaje recomendado, y limitas el consumo de grasas saturadas por debajo del 10%, seguirás engordando si en tu cuerpo entran más calorías de las que quemas.
Hay mucha gente que piensa que mientras estén tomando alimentos bajos en grasa o incluso sin nada de grasa, su peso no sólo no aumentará sino que incluso disminuirá. Es totalmente falso, lo que cuenta es la cantidad total de calorías. Aunque no tomes grasas, los hidratos de carbono se pueden acumular como grasa en tu cuerpo, cuando ingieres un exceso de los mismos, como reserva para cuando vengan “tiempos peores”, esta es una de las razonas por la que los quemagrasas te pueden beneficiar.
No queremos decir que las proteínas, la grasa y los carbohidratos sean todos lo mismo. Claramente la grasa es “el malo de la película” si te pasas en su consumo y las dietas altas en grasa se asocian a cuadros de obesidad, problemas cardiovasculares y cáncer. La grasa tiene mucha más densidad de calorías que el resto de nutrientes, (9 Kcal por gramo frente a las 4 de los hidratos de carbono o las proteínas) y la grasa tiene más facilidad para acumularse como tal en el cuerpo, pero consumir grasas no es el único culpable de los michelines y las barrigas prominentes.
“Los carbohidratos engordan y se transforman en grasa” Gran parte de la crítica recibida por los hidratos de carbono se debe a las dietas altas en proteínas.
Algunos dicen que las dietas altas en carbohidratos elevan los niveles de insulina por encima de lo normal y que un alto nivel de insulina inhibe la quema de grasas. 
Los partidarios de estas dietas afirman que hay que comer más proteínas y menos carbohidratos, de esta forma los niveles de insulina son bajos y se promueve la quema de las grasas. Sin embargo, casi todos los expertos en nutrición deportiva están en desacuerdo con esta idea.
Glen Gaesser, experto en metabolismo de la Universidad de Georgia, dice que “si hay más personas con sobrepeso ahora no es por sus dietas altas en carbohidratos, sino porque en general la población está comiendo mucha más cantidad de alimentos”.
“Es más importante la proporción de grasa corporal que el peso total” Así es, en efecto, por eso al subir a la
báscula tienes únicamente un dato parcial, el peso, que no tiene un gran significado si no lo comparas con otro
mucho más importante, la proporción de este peso que es grasa y la proporción que es tejido magro o músculo.
De hecho suele ocurrir cuando se inicia un programa de entrenamiento que al principio se gana peso. Esto no significa que el programa esté mal encaminado, lo normal es que esta ganancia se deba a un aumento de masa muscular. El músculo es más denso que la grasa y por tanto más pesado. Con un analizador de grasa corporal podrás saber si las cosas van realmente bien. Si pesas más pero has ganado masa muscular vas por el buen camino, este músculo es tejido metabólicamente muy activo que quemará calorías incluso mientras estás durmiendo, pues tiene un gasto muy superior al del tejido graso.

“Los carbohidratos engordan y se transforman en grasa” 
Gran parte de la crítica recibida por los hidratos de carbono se debe a las dietas altas en proteínas.
Algunos dicen que las dietas altas en carbohidratos elevan los niveles de insulina por encima de lo normal y que un alto nivel de insulina inhibe la quema de grasas.
Los partidarios de estas dietas afirman que hay que comer más proteínas y menos carbohidratos, de esta forma los niveles de insulina son bajos y se promueve la quema de las grasas. Sin embargo, casi todos los expertos en nutrición deportiva están en desacuerdo con esta idea.
Glen Gaesser, experto en metabolismo de la Universidad de Georgia, dice que “si hay más personas con sobrepeso ahora no es por sus dietas altas en carbohidratos, sino porque en general la población está comiendo mucha más cantidad de alimentos”.

CARNITINA, la molécula devoragrasas.

CARNITINA, la molécula devoragrasas. 
La carnitina o 4-trimetilamino-3-hidroxibutirato (conocida también como L-carnitina o levocarnitina, debido a que en estado natural es un estereoisómero L) es un nutriente sintetizado en el hígado, riñones y cerebro a partir de dos aminoácidos esenciales, la lisina y la metionina.
La carnitina es responsable del transporte de ácidos grasos al interior de las mitocondrias, orgánulos celulares encargadas de la producción de energía.
Es uno de los componentes mas populares y utilizados en los suplementos quemagrasas de la familia de los lipotrópicos.
Su función, por tanto, es transportar la grasa hasta las zonas de la célula (mitocondrias) en las que se quema para originar energía.
Los efectos de la L-Carnitina que tienen alguna base científica son los siguientes:
  • Ayuda a metabolizar los ácidos grasos, de hecho es necesaria para transportar los ácidos grasos provenientes del tejido adiposo hasta la mitocondria celular donde son utilizados para producir energía.
  • En algunos estudios se aprecia una reducción de la utilización del glucógeno muscular y hepático para producir energía. Esto podría suponer una mejora de la resistencia aeróbica y una mayor capacidad para producir energía durante más tiempo.
  • Protección de la masa muscular, actúa como anticatabólico disminuyendo la destrucción de la masa muscular.
  • Incremento del VO2 max. en ciclistas y corredores. Supone una mejora en todo el sistema de transporte y utilización de oxígeno para producir energía, o sea mejor rendimiento.
Últimos descubrimientos de la Carnitina:
  • Reduce el daño muscular producido por el ejercicio, por lo que mejora la capacidad de recuperación.
  • Tras la suplementación con L-Carnitina hay mayor disponibilidad de receptores de andrógenos lo que puede resultar en una mayor utilización de la testosterona endógena, o sea mayor recuperación y aumento de masa muscular.
Tomando L-Carnitina tu cuerpo reduce sus depósitos grasos y no destruye las proteínas musculares cuando entrenas y sigues una dieta restrictiva. Este punto es especialmente importante en deportistas que entrenar regularmente, pero sirve igual para personas que quieran perder peso.

SUPLEMENTOS DE CARNITINA
Vamos a dar un repaso a las diferentes maneras de presentación así como de las fórmulas de L-Carnitina que encontramos en el mercado.
En las etiquetas de los suplementos podéis encontrar las siguientes formas de Carnitina, aquí te decimos para que sirve cada una:
L-Carnitina base:
Es la forma 100% pura que, por tanto, tiene la máxima concentración. La encontrarás sobretodo en viales de Carnitina líquida.
L-Carnitina Tartrato:
Es una molécula que contiene un 68% de Carnitina. La encontrarás en la mayoría de barritas o suplementos en cápsulas ya que tiene mejor sabor.
Acetil ¿L-Carnitina:
Contiene aproximadamente un 98% de Carnitina y puede atravesar la barrera hematoencefálica y utilizarse como una fuente de grupos acetilo para la síntesis de acetilcolina (neurotransmisor). Se encuentra en forma de cápsulas o comprimidos por regla general.
L-Carnitina Magnesio Citrato:
Es una sal de Carnitina que la contiene en un 40%,se usa sobretodo en tabletas efervescentes, en bebidas y barritas.

Cada presentación corresponde a una mayor comodidad de utilización, siendo la más recomendable por su pureza y potencia la L-Carnitina base contenida sobretodo en los viales líquidos (que además es la forma en que más rápidamente se absorbe la L-Carnitina ).
Podemos encontrar en el mercado suplementos con asociaciones de LCarnitina con otros suplementos, generalmente con reductores de grasa y energéticos. Estas asociaciones pueden ser interesantes (por ejemplo con el guaraná si queremos energía y reducir grasa), pero hay que tener muy en cuenta la cantidad y tipo de L-Carnitina que tomamos para que sea realmente efectivo el suplemento. Un estudio hecho en Japón, muestra un aumento de la oxidación de las grasas y una mejora de la resistencia cuando se toma L-Carnitina con una fuente de cafeína. El efecto de los suplementos tomados al mismo tiempo se complementa y potencia, actúan sinérgicamente.
En www.laproteina.es puedes encontrar los mejores suplementos de L-Carnitina del mercado, siempre al mejor precio.
THERMOLEAN 90 CAPSULAS de AMIX

Tipos de suplementos para la perdida de peso

Tipos de suplementos para la perdida de peso
Hoy en día la suplementación es clave para cualquier deportista.
Actualmente los suplementos son usados por absolutamente todos los que buscan resultados, sobre todo a nivel profesional.
Os recomendamos aprovechar esta ayuda ergogénica, recurriendo a marcas serias y conocidas.

TERMOGÉNICOS
Su función es la aceleración del metabolismo, logrando un consumo energético más elevado en todo momento.
Las calorías adicionales que el cuerpo necesita las obtiene de la quema de las grasas.
Son productos que te activan, mejoran la percepción y te hacen estar más alerta.
Hay que saber que contienen sustancias que pueden afectar a las personas sensibles a la cafeína y a los estimulantes.
Plantas tradicionales como los tes rojos y verdes, se usan a menudo en la elaboración de suplementos termogénicos.
Además tienen virtudes antioxidantes, más que apreciadas por los deportistas.
Es importante conocer que su acción termogénica depende en gran medida de la concentración de catequinas activas, que no se suelen encontrar en muchos quemagrasas. Fíjate en las etiquetas con la composición para encontrarlas.
Otras plantas, como el guaraná, originaria de la Amazonia, contienen sustancias tónicas adelgazantes y estimulantes, usadas por los indios desde tiempos remotos para cazar, correr y como revitalizante. Podrás encontrar también L-Tirosina, un aminoácido que potencia la acción quemagrasas del resto de componentes,
o Citrus Aurantium, también estimulante.
 
BLOQUEADORES
Como su nombre indica, impiden la absorción de algunos carbohidratos y de gran parte de las grasas. Logran reducir la cantidad de calorías que el cuerpo asimila sin tener que recurrir a restricciones en la alimentación.
Algunos bloqueadores inhiben el funcionamiento de la amilasa, la enzima que degrada los almidones de los alimentos, de forma que no se pueden digerir hasta en un 75%.
Otros bloqueadores te dan sensación de saciedad, disminuyendo la sensación de apetito y disminuyendo también la conversión de carbohidratos en grasa y colesterol.
 
DEPURATIVOS
Indicados especialmente cuando hay retención de líquidos.Tienen acción depurativa y en muchos casos están formulados con plantas de uso tradicional como puede ser la cebolla, la alcachofa, el ajo, el hinojo o el té rojo. Son digestivos y reducen la hinchazón estomacal.
Son suplementos muy usados en fitness, por mejorar espectacularmente la definición muscular al eliminar agua retenida en el tejido muscular.
 
LIPOTRÓPICOS
Transportan las grasas hasta las mitocondrias, orgánulos de las células que se encargan de quemarlas para transformarlas en energía.
Emulsionan las grasas y asi se facilita su transporte y conversión a energía.
Algunos lipotrópicos contienen sustancias que ayudan a movilizar el agua retenida (como el yoduro potásico). Consiguen eliminar grasa sin estimular y sin perder masa muscular.

Sustancias con efecto saciante o inhibidores del apetito

Sustancias con efecto saciante o inhibidores del apetito
1. Glucomanano
El glucomanano es un polisacárido (hidrato de carbono complejo) no digerible que se extrae del tubérculo de una planta asiática llamada Amorphophallus konjac C. Koch. Se emplea el rizoma seco, triturado y purificado.
Este compuesto, al ser capaz de absorber agua formando un gel espeso, ingerido junto con abundante líquido, posee efecto saciante. Al tomarlo disminuye la sensación de estómago vacío y, por consiguiente, el apetito o la necesidad de comer.
Otra de las funciones que se le atribuyen es la de aumentar el volumen de las heces y conseguir así regular la función intestinal y evitar el estreñimiento, actuando como un laxante suave.

2. Fucus vesiculosus
El fucus (Fucus vesiculosus) es un alga parda que puede alcanzar los 30 y hasta 90 cm de longitud. La algina, una sustancia que tiene capacidad de absorber grandes cantidades de agua, alcanza entre el 18 y el 30% del peso seco del fucus. Además, esta alga es rica en manitol, un hidrato de carbono al que se le atribuyen propiedades laxantes y diuréticas. Su contenido en yodo es otro de los valores nutricionales por los que el fucus se emplea como complemento alimenticio.
Debido a su contenido en yodo se preconizó su uso como estimulante tiroideo en casos de bocio y como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso. Sin embargo, no está suficientemente documentada ni probada la posibilidad de aparición de efectos secundarios tras su consumo con este fin. Además, su consumo está contraindicado en caso de que se siga un tratamiento con hormonas tiroideas o con agentes antitiroideos, ansiedad, insomnio, taquicardia, hipertensión arterial y cardiopatías.

3. Nopal
Las especies de Opuntia (nopales, tunas o chumberas) son un género de plantas de la familia de las Cactáceas. Esta familia consta de más de 300 especies todas oriundas del continente americano, desde el norte de Estados Unidos hasta la Patagonia, donde viven silvestres. En España el nopal es popularmente conocido como chumbera.
Los nopales han sido y siguen siendo una fuente alimenticia en México desde hace cientos de años. Como vegetal se emplean en ensaladas, sopas, guisos y asados, y admiten multitud de preparaciones culinarias. La fruta se emplea principalmente para elaborar dulces y jaleas.
Del nopal se destaca su alto contenido en fibra, tanto soluble como insoluble, esta última más abundante. Precisamente su riqueza en fibra soluble (pectina, gomas y mucílagos) es la razón por la cual se le atribuye un efecto saciante y de disminución de la absorción de grasas a nivel intestinal.

4. Fructooligosacáridos
Los fructooligosacáridos (FOS) son oligosacáridos naturales (fibra soluble) que contienen fructosa y que pertenecen a un grupo de compuestos que se conocen colectivamente como prebióticos.
Los FOS son derivados de otro oligosacárido, la inulina, y están presentes naturalmente en distintas clases de vegetales como el puerro, la cebolla, la achicoria (raíz), el espárrago, el ajo, la alcachofa, el tomate, la alfalfa, el plátano, etc. Para su comercialización se obtienen comúnmente de la raíz de la achicoria o por procesos sintéticos a partir de la remolacha azucarera.
Se les atribuye la propiedad potencial de mejorar la salud al promover el crecimiento selectivo de bacterias intestinales beneficiosas, las bifidobacterias y los lactobacilos.
Debido a que son un tipo de fibra, se han utilizado ampliamente para disminuir el tiempo de tránsito intestinal en caso de estreñimiento y para el mantenimiento de la flora beneficiosa del colon.
Existe numerosa información acerca de las acciones que ejercen sobre la salud provenientes de diferentes estudios con distinto nivel de evidencia científica, que aluden no solo a la mejora de la fisiología gastrointestinal, sino a acciones positivas en el sistema inmune, la biodisponibilidad de minerales, el metabolismo de las grasas y la carcinogénesis en el colon.

Sustancias con efecto laxante

Sustancias con efecto laxante
1. Cáscara sagrada
La cáscara sagrada se obtiene de la corteza desecada de las ramas y del tronco del árbol Rhamnus prusiana D.C. La corteza se corta en pequeños trozos que se dejan secar durante al menos un año antes de usarla como planta medicinal. Se comercializa en forma líquida o en comprimidos.

La cáscara sagrada es una planta muy usada en medicina y en fitoterapia con fines laxantes, y pertenece al grupo de laxantes irritantes o catárticos debido a su contenido en glucósidos antraquinónicos. Estos compuestos no son activos de por sí, pero en el organismo liberan sustancias derivadas de la antraquinona, denominadas en general emodinas, las principales responsables del efecto laxante (a dosis bajas) o purgante (a dosis mayores) de la cáscara sagrada.
Su ingestión provoca la estimulación del sistema nervioso autónomo parasimpático en el intestino. Su acción directa sobre las paredes nerviosas del colon produce el consiguiente aumento de la motilidad intestinal y de la irritación de la mucosa intestinal.
Las indicaciones médicas para el uso de cáscara sagrada son muy limitadas por los efectos secundarios que provoca (diarrea, espasmos intestinales y dolores abdominales e intestinales), sobre todo si se administra de forma crónica, a dosis mayores de las aconsejadas o por la propia sensibilidad individual. Sus efectos comienzan a aparecer unas seis u ocho horas después de su administración oral. Se consume con demasiada ligereza como complemento alimenticio para tratar la indigestión en general y el estreñimiento en particular.

2. Glucomanano
El glucomanano es un polisacárido (hidrato de carbono complejo) no digerible que se extrae del tubérculo de una planta asiática llamada Amorphophallus konjac C. Koch. Se emplea el rizoma seco, triturado y purificado.
Este compuesto, al ser capaz de absorber agua formando un gel espeso, ingerido junto con abundante líquido, posee efecto saciante. Al tomarlo disminuye la sensación de estómago vacío y, por consiguiente, el apetito o la necesidad de comer.
Otra de las funciones que se le atribuyen es la de aumentar el volumen de las heces y conseguir así regular la función intestinal y evitar el estreñimiento, actuando como un laxante suave.

3. Fructooligosacáridos
Los fructooligosacáridos (FOS) son oligosacáridos naturales (fibra soluble) que contienen fructosa y que pertenecen a un grupo de compuestos que se conocen colectivamente como prebióticos.
Los FOS son derivados de otro oligosacárido, la inulina, y están presentes naturalmente en distintas clases de vegetales como el puerro, la cebolla, la achicoria (raíz), el espárrago, el ajo, la alcachofa, el tomate, la alfalfa, el plátano, etc. Para su comercialización se obtienen comúnmente de la raíz de la achicoria o por procesos sintéticos a partir de la remolacha azucarera.
Se les atribuye la propiedad potencial de mejorar la salud al promover el crecimiento selectivo de bacterias intestinales beneficiosas, las bifidobacterias y los lactobacilos.
Debido a que son un tipo de fibra, se han utilizado ampliamente para disminuir el tiempo de tránsito intestinal en caso de estreñimiento y para el mantenimiento de la flora beneficiosa del colon.
Existe numerosa información acerca de las acciones que ejercen sobre la salud provenientes de diferentes estudios con distinto nivel de evidencia científica, que aluden no solo a la mejora de la fisiología gastrointestinal, sino a acciones positivas en el sistema inmune, la biodisponibilidad de minerales, el metabolismo de las grasas y la carcinogénesis en el colon.

Sustancias con efecto diurético

Sustancias con efecto diurético
1. Cola de caballo
La cola de caballo (Equisetum arvense) es una planta que por su composición y complemento alimenticio (saponósidos, taninos, flavonoides, alcaloides y sales minerales -sobre todo sílice y potasio- y vitamina C), se le atribuyen diversas acciones, entre ellas, diurética, remineralizante y cicatrizante.

Por su contenido en sílice y potasio, se revela como diurético, y ha estado indicada tradicionalmente en afecciones renales e inflamaciones de la vejiga urinaria y de la próstata, y para quienes tienen la necesidad de aumentar la cantidad de orina por tener tendencia a retener líquidos.
Un diurético es toda sustancia que al ser ingerida provoca una eliminación de agua y de sodio a través de la orina. Las plantas y los medicamentos con efectos diuréticos siempre se han de utilizar bajo la supervisión de un facultativo.

2. Extracto de alcachofa
Las hojas desecadas de la alcachofa (Cynara scolymus L.) se utilizan como ingrediente en suplementos dietéticos para la pérdida de peso y/o para mejorar las digestiones.

Se le atribuyen propiedades diuréticas y lipotrópicas (quema grasas) y se ha utilizado tradicionalmente por su probada acción colerética y colagoga (estimulante de la liberación biliar). Las hojas de alcachofa han demostrado aumentar la producción y la eliminación de bilis debido a la presencia de los derivados del ácido cafeico (cinarina principalmente). En personas con trastornos digestivos y hepatobiliares también se ha observado una disminución significativa de los síntomas de dispepsia (dolor abdominal, flatulencia, náuseas).

3 Té verde
El té verde (Camellia sinensis) se obtiene secando las hojas de la planta del té por acción del vapor (sistema japonés) o por el calentamiento (sistema chino). Estos procesos casi no alteran su composición química. Estas hojas no se dejan fermentar después de cosechado y antes del proceso de secado, para que retenga los ingredientes activos de la planta (polifenoles). Los polifenoles son esenciales en la fisiología de las plantas, para la pigmentación, crecimiento, reproducción y protección contra las plagas. Estos polifenoles del té verde, comúnmente llamados catequinas, son precisamente a los que se les atribuye la propiedad anti-obesidad de este tipo de té.
En la última década diversos estudios han sugerido que el extracto de té verde podría actuar de dos maneras en la pérdida de peso: acelerando el metabolismo y ayudando a la disminución de grasa corporal total.
Sobre todo en los últimos tres años se ha multiplicado la aparición de trabajos realizados desde prestigiosos centros de investigación, que han administrado té verde o sus extractos, a personas con normopeso o de peso normal o a personas con sobrepeso u obesidad y han estudiado sus efectos en su metabolismo y en el tejido adiposo. De este modo se ha superado el obstáculo de contar solamente con estudios "in vitro" (en el laboratorio) o "in vivo" en animales, que apoyaban la hipótesis de los efectos "termogénicos" (de aumentar el gasto energético) o "quema-grasas" de esta planta.

Sustancias que aumentan el gasto energético

Sustancias que aumentan el gasto energético
1. CLA, Ácido linoleico conjugado
Tonalin® es el nombre comercial del ácido linoléico conjugado (CLA, siglas en inglés), un ácido graso derivado del ácido linoléico poliinsaturado de la serie omega 6. El CLA se encuentra de forma natural en los aceites vegetales y en mayor proporción en alimentos de origen animal como los productos lácteos y la carne de rumiantes. En el ser humano las bacterias intestinales producen pequeñas cantidades de esta sustancia.
La atención comercial en el CLA tuvo su origen cuando algunos estudios realizados en ratones, mostraron que animales alimentados con suplementos de CLA reducían sustancialmente su masa grasa corporal.

2. Té verde
El té verde (Camellia sinensis) se obtiene secando las hojas de la planta del té por acción del vapor (sistema japonés) o por el calentamiento (sistema chino). Estos procesos casi no alteran su composición química. Estas hojas no se dejan fermentar después de cosechado y antes del proceso de secado, para que retenga los ingredientes activos de la planta (polifenoles). Los polifenoles son esenciales en la fisiología de las plantas, para la pigmentación, crecimiento, reproducción y protección contra las plagas. Estos polifenoles del té verde, comúnmente llamados catequinas, son precisamente a los que se les atribuye la propiedad anti-obesidad de este tipo de té.
En la última década diversos estudios han sugerido que el extracto de té verde podría actuar de dos maneras en la pérdida de peso: acelerando el metabolismo y ayudando a la disminución de grasa corporal total.
Sobre todo en los últimos tres años se ha multiplicado la aparición de trabajos realizados desde prestigiosos centros de investigación, que han administrado té verde o sus extractos, a personas con normopeso o de peso normal o a personas con sobrepeso u obesidad y han estudiado sus efectos en su metabolismo y en el tejido adiposo. De este modo se ha superado el obstáculo de contar solamente con estudios "in vitro" (en el laboratorio) o "in vivo" en animales, que apoyaban la hipótesis de los efectos "termogénicos" (de aumentar el gasto energético) o "quema-grasas" de esta planta.

3. Cafeína y polifenoles
Las xantinas (la cafeína es una de las más conocidas) y los polifenoles, son los componentes químicos mayoritarios de un grupo de plantas de uso habitual como son el café, el té, la yerba mate y el cacao.
En los últimos años se están asociando estas dos sustancias a un posible efecto activador de la termogénesis (aumento del gasto energético corporal) y por ello se están usando como ingredientes de complementos dietéticos para perder peso.
Diversos estudios explican que el mecanismo de acción de la cafeína y de los polifenoles es el de estimular el sistema nervioso central pudiendo promover la lipolísis (quema grasas) y la termogénesis, al aumentar el gasto energético, con efectos en la pérdida de masa grasa corporal y el aumento de la excreción de grasa fecal.

4. Fucus vesiculosus

El fucus (Fucus vesiculosus) es un alga parda que puede alcanzar los 30 y hasta 90 cm de longitud. La algina, una sustancia que tiene capacidad de absorber grandes cantidades de agua, alcanza entre el 18 y el 30% del peso seco del fucus. Además, esta alga es rica en manitol, un hidrato de carbono al que se le atribuyen propiedades laxantes y diuréticas. Su contenido en yodo es otro de los valores nutricionales por los que el fucus se emplea como complemento alimenticio.

Debido a su contenido en yodo se preconizó su uso como estimulante tiroideo en casos de bocio y como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso. Sin embargo, no está suficientemente documentada ni probada la posibilidad de aparición de efectos secundarios tras su consumo con este fin. Además, su consumo está contraindicado en caso de que se siga un tratamiento con hormonas tiroideas o con agentes antitiroideos, ansiedad, insomnio, taquicardia, hipertensión arterial y cardiopatías.

Sustancias con efecto quema grasas o lipotropico

Sustancias con efecto quema grasas o lipotropico
1. L-Carnitina
La L-carnitina es la forma activa para el organismo del compuesto carnitina. Es usada entre otras cosas, como complemento dietético para el adelgazamiento. El organismo la produce naturalmente a partir de dos aminoácidos (lisina y metionina) y se encuentra naturalmente en las células del cuerpo sobre todo en las del músculo esquelético y cardíaco. Los alimentos de origen animal como carnes, pescados y lácteos son fuente dietética natural de L-carnitina.

Se encarga del transporte de los ácidos grasos de cadena larga hacia el interior de la mitocondria (central energética de las células), lugar de la célula donde son oxidados o "quemados" para producir energía. Por esta razón las empresas productoras de complementos alimenticios y alimentos funcionales incluyen L-carnitina en la composición de sus productos. Utilizan en muchos casos el gancho publicitario de potente "quema grasas", justificado por su papel en la producción de energía corporal.

2. CLA, Ácido linoleico conjugado
Tonalin® es el nombre comercial del ácido linoléico conjugado (CLA, siglas en inglés), un ácido graso derivado del ácido linoléico poliinsaturado de la serie omega 6. El CLA se encuentra de forma natural en los aceites vegetales y en mayor proporción en alimentos de origen animal como los productos lácteos y la carne de rumiantes. En el ser humano las bacterias intestinales producen pequeñas cantidades de esta sustancia.
La atención comercial en el CLA tuvo su origen cuando algunos estudios realizados en ratones, mostraron que animales alimentados con suplementos de CLA reducían sustancialmente su masa grasa corporal.


3. Sinefrina del Citrus aurantium
La sinefrina es una amina simpatomimética, un compuesto químico similar estructuralmente a la conocida efedrina. La sinefrina procede del Citrus aurantium, un pequeño árbol conocido popularmente como naranjo amargo.
Se vende en forma de complemento ayudante en la pérdida de peso y se le atribuyen propiedades termogénicas (estimulantes del gasto energético) y saciantes. Desde que la hierba Ma huang (Ephedra sínica) ha sido calificado por la Food and Drug Administration (FDA) de los Estados Unidos como sustancia insegura por sus efectos adversos a nivel neurológico y cardiovascular, la industria de los suplementos dietéticos ha desarrollado "productos libres de efedra" que utilizan sinefrina como sustituto. Según sus productores ejerce acciones similares pero sin los efectos secundarios de la efedrina.
 
4. Extracto de alcachofa
Las hojas desecadas de la alcachofa (Cynara scolymus L.) se utilizan como ingrediente en suplementos dietéticos para la pérdida de peso y/o para mejorar las digestiones.

Se le atribuyen propiedades diuréticas y lipotrópicas (quema grasas) y se ha utilizado tradicionalmente por su probada acción colerética y colagoga (estimulante de la liberación biliar). Las hojas de alcachofa han demostrado aumentar la producción y la eliminación de bilis debido a la presencia de los derivados del ácido cafeico (cinarina principalmente). En personas con trastornos digestivos y hepatobiliares también se ha observado una disminución significativa de los síntomas de dispepsia (dolor abdominal, flatulencia, náuseas). 
5. Cafeína y polifenoles
Las xantinas (la cafeína es una de las más conocidas) y los polifenoles, son los componentes químicos mayoritarios de un grupo de plantas de uso habitual como son el café, el té, la yerba mate y el cacao.
En los últimos años se están asociando estas dos sustancias a un posible efecto activador de la termogénesis (aumento del gasto energético corporal) y por ello se están usando como ingredientes de complementos dietéticos para perder peso.
Diversos estudios explican que el mecanismo de acción de la cafeína y de los polifenoles es el de estimular el sistema nervioso central pudiendo promover la lipolísis (quema grasas) y la termogénesis, al aumentar el gasto energético, con efectos en la pérdida de masa grasa corporal y el aumento de la excreción de grasa fecal.

6. Calcio
El organismo humano contiene algo más de 1 kilo de calcio acumulado en los huesos y en los dientes, y cantidades mucho más pequeñas están distribuidas por la sangre y los distintos tejidos. La concentración de calcio en el organismo aumenta hasta el final de la época de crecimiento (hacia los 30 años). Posteriormente, el intercambio con el exterior sigue siendo intenso, y se produce una constante eliminación del mismo que debe ser repuesto a partir del calcio procedente de los alimentos (leche y derivados, sardinas en aceite y algunas verduras, frutos secos y legumbres, si bien calcio de los vegetales tiene menos biodisponiblidad para el organismo).
Tanto su carencia como su exceso son perjudiciales para la salud, ya que además de su papel en el desarrollo y mantenimiento óseo, participa en la coagulación sanguínea, en la correcta permeabilidad de las membranas y a su vez adquiere fundamental importancia como regulador nervioso y neuromuscular. Interviene en la contracción muscular, la absorción y secreción intestinal y la liberación de hormonas.
El mayor uso que se le da a los complementos alimenticios de calcio, tanto en la industria farmaceútica como la alimentaria, es la de servir de aporte extra para la salud ósea.
En su relación con el tratamiento del sobrepeso y la obesidad, diferentes estudios han encontrado una relación inversa entre la ingestión elevada de calcio y el peso corporal o la masa grasa. En estudios "in vitro" (realizados en el laboratorio), el calcio podría inhibir la lipogénesis (formación de grasa) y estimular la lipolisis (movilización de grasas), lo que produciría una disminución del almacenamiento de triglicéridos en los adipocitos (células del tejido adiposo o graso).

7. Té verde
El té verde (Camellia sinensis) se obtiene secando las hojas de la planta del té por acción del vapor (sistema japonés) o por el calentamiento (sistema chino). Estos procesos casi no alteran su composición química. Estas hojas no se dejan fermentar después de cosechado y antes del proceso de secado, para que retenga los ingredientes activos de la planta (polifenoles). Los polifenoles son esenciales en la fisiología de las plantas, para la pigmentación, crecimiento, reproducción y protección contra las plagas. Estos polifenoles del té verde, comúnmente llamados catequinas, son precisamente a los que se les atribuye la propiedad anti-obesidad de este tipo de té.
En la última década diversos estudios han sugerido que el extracto de té verde podría actuar de dos maneras en la pérdida de peso: acelerando el metabolismo y ayudando a la disminución de grasa corporal total.
Sobre todo en los últimos tres años se ha multiplicado la aparición de trabajos realizados desde prestigiosos centros de investigación, que han administrado té verde o sus extractos, a personas con normopeso o de peso normal o a personas con sobrepeso u obesidad y han estudiado sus efectos en su metabolismo y en el tejido adiposo. De este modo se ha superado el obstáculo de contar solamente con estudios "in vitro" (en el laboratorio) o "in vivo" en animales, que apoyaban la hipótesis de los efectos "termogénicos" (de aumentar el gasto energético) o "quema-grasas" de esta planta.

Sustancias que disminuyen la absorción de grasas y/o favorecen su eliminación

Sustancias que disminuyen la absorción de grasas y/o favorecen su eliminación 
1. Extracto de Alcachofa
Las hojas desecadas de la alcachofa (Cynara scolymus L.) se utilizan como ingrediente en suplementos dietéticos para la pérdida de peso y/o para mejorar las digestiones.

Se le atribuyen propiedades diuréticas y lipotrópicas (quema grasas) y se ha utilizado tradicionalmente por su probada acción colerética y colagoga (estimulante de la liberación biliar). Las hojas de alcachofa han demostrado aumentar la producción y la eliminación de bilis debido a la presencia de los derivados del ácido cafeico (cinarina principalmente). En personas con trastornos digestivos y hepatobiliares también se ha observado una disminución significativa de los síntomas de dispepsia (dolor abdominal, flatulencia, náuseas). 

2. Chitosan
El chitosan es un polisacárido obtenido a partir de residuos del marisco. Está compuesto del principal material que forma el caparazón de los crustáceos, el chitin, y se puede obtener mediante un proceso enzimático que ha sido adaptado y modificado para obtener los resultados deseados. Para esta sustancia se han descrito aplicaciones biomédicas, en la cosmética, en la producción de productos químicos como pinturas o en la industria alimentaria.

En la industria farmaceútica y alimentaria está teniendo una amplia promoción como producto para reducir la absorción de grasas en el aparato digestivo y existen algunos datos de estudios en animales que apoyan esta hipótesis. Se le atribuye la expulsión fecal de las grasas provenientes de la dieta y por tanto un efecto adelgazante al reducir la cantidad de este nutriente que pasa desde el intestino a la sangre.

3. Nopal
Las especies de Opuntia (nopales, tunas o chumberas) son un género de plantas de la familia de las Cactáceas. Esta familia consta de más de 300 especies todas oriundas del continente americano, desde el norte de Estados Unidos hasta la Patagonia, donde viven silvestres. En España el nopal es popularmente conocido como chumbera.
Los nopales han sido y siguen siendo una fuente alimenticia en México desde hace cientos de años. Como vegetal se emplean en ensaladas, sopas, guisos y asados, y admiten multitud de preparaciones culinarias. La fruta se emplea principalmente para elaborar dulces y jaleas.
Del nopal se destaca su alto contenido en fibra, tanto soluble como insoluble, esta última más abundante. Precisamente su riqueza en fibra soluble (pectina, gomas y mucílagos) es la razón por la cual se le atribuye un efecto saciante y de disminución de la absorción de grasas a nivel intestinal.

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SUSTANCIAS QUE AYUDAN A PERDER PESO
Disminuyen la absorción de grasas y/o favorecen su eliminación
Extracto de Alcachofa
Chitosan
Nopal
Quema grasas
L-Carnitina
CLA, Ácido linoleico conjugado
Sinefrina del Citrus aurantium
Extracto de alcachofa
Cafeína y polifenoles
Calcio
Té verde
Aumentan el gasto energético
CLA, Ácido linoleico conjugado
Té verde
Cafeína y polifenoles
Fucus vesiculosus
Diuréticos
Cola de caballo
Extracto de alcachofa
Té verde
Laxantes
Cáscara sagrada
Glucomanano
Fructooligosacáridos
Saciantes o inhibidores del apetito
Glucomanano
Fucus vesiculosus
Nopal
Fructooligosacáridos


1. Disminuyen la absorción de grasas y/o favorecen su eliminación
1.1. Extracto de Alcachofa
Las hojas desecadas de la alcachofa (Cynara scolymus L.) se utilizan como ingrediente en suplementos dietéticos para la pérdida de peso y/o para mejorar las digestiones.

Se le atribuyen propiedades diuréticas y lipotrópicas (quema grasas) y se ha utilizado tradicionalmente por su probada acción colerética y colagoga (estimulante de la liberación biliar). Las hojas de alcachofa han demostrado aumentar la producción y la eliminación de bilis debido a la presencia de los derivados del ácido cafeico (cinarina principalmente). En personas con trastornos digestivos y hepatobiliares también se ha observado una disminución significativa de los síntomas de dispepsia (dolor abdominal, flatulencia, náuseas). 

1.2. Chitosan
El chitosan es un polisacárido obtenido a partir de residuos del marisco. Está compuesto del principal material que forma el caparazón de los crustáceos, el chitin, y se puede obtener mediante un proceso enzimático que ha sido adaptado y modificado para obtener los resultados deseados. Para esta sustancia se han descrito aplicaciones biomédicas, en la cosmética, en la producción de productos químicos como pinturas o en la industria alimentaria.
En la industria farmaceútica y alimentaria está teniendo una amplia promoción como producto para reducir la absorción de grasas en el aparato digestivo y existen algunos datos de estudios en animales que apoyan esta hipótesis. Se le atribuye la expulsión fecal de las grasas provenientes de la dieta y por tanto un efecto adelgazante al reducir la cantidad de este nutriente que pasa desde el intestino a la sangre.

1.3. Nopal
Las especies de Opuntia (nopales, tunas o chumberas) son un género de plantas de la familia de las Cactáceas. Esta familia consta de más de 300 especies todas oriundas del continente americano, desde el norte de Estados Unidos hasta la Patagonia, donde viven silvestres. En España el nopal es popularmente conocido como chumbera.
Los nopales han sido y siguen siendo una fuente alimenticia en México desde hace cientos de años. Como vegetal se emplean en ensaladas, sopas, guisos y asados, y admiten multitud de preparaciones culinarias. La fruta se emplea principalmente para elaborar dulces y jaleas.
Del nopal se destaca su alto contenido en fibra, tanto soluble como insoluble, esta última más abundante. Precisamente su riqueza en fibra soluble (pectina, gomas y mucílagos) es la razón por la cual se le atribuye un efecto saciante y de disminución de la absorción de grasas a nivel intestinal.

2. Quema grasas
2.1. L-Carnitina
La L-carnitina es la forma activa para el organismo del compuesto carnitina. Es usada entre otras cosas, como complemento dietético para el adelgazamiento. El organismo la produce naturalmente a partir de dos aminoácidos (lisina y metionina) y se encuentra naturalmente en las células del cuerpo sobre todo en las del músculo esquelético y cardíaco. Los alimentos de origen animal como carnes, pescados y lácteos son fuente dietética natural de L-carnitina.
Se encarga del transporte de los ácidos grasos de cadena larga hacia el interior de la mitocondria (central energética de las células), lugar de la célula donde son oxidados o "quemados" para producir energía. Por esta razón las empresas productoras de complementos alimenticios y alimentos funcionales incluyen L-carnitina en la composición de sus productos. Utilizan en muchos casos el gancho publicitario de potente "quema grasas", justificado por su papel en la producción de energía corporal.

2.2. CLA, Ácido linoleico conjugado
Tonalin® es el nombre comercial del ácido linoléico conjugado (CLA, siglas en inglés), un ácido graso derivado del ácido linoléico poliinsaturado de la serie omega 6. El CLA se encuentra de forma natural en los aceites vegetales y en mayor proporción en alimentos de origen animal como los productos lácteos y la carne de rumiantes. En el ser humano las bacterias intestinales producen pequeñas cantidades de esta sustancia.
La atención comercial en el CLA tuvo su origen cuando algunos estudios realizados en ratones, mostraron que animales alimentados con suplementos de CLA reducían sustancialmente su masa grasa corporal.

2.3. Sinefrina del Citrus aurantium
La sinefrina es una amina simpatomimética, un compuesto químico similar estructuralmente a la conocida efedrina. La sinefrina procede del Citrus aurantium, un pequeño árbol conocido popularmente como naranjo amargo.
Se vende en forma de complemento ayudante en la pérdida de peso y se le atribuyen propiedades termogénicas (estimulantes del gasto energético) y saciantes. Desde que la hierba Ma huang (Ephedra sínica) ha sido calificado por la Food and Drug Administration (FDA) de los Estados Unidos como sustancia insegura por sus efectos adversos a nivel neurológico y cardiovascular, la industria de los suplementos dietéticos ha desarrollado "productos libres de efedra" que utilizan sinefrina como sustituto. Según sus productores ejerce acciones similares pero sin los efectos secundarios de la efedrina.
 
2.4. Extracto de alcachofa
Las hojas desecadas de la alcachofa (Cynara scolymus L.) se utilizan como ingrediente en suplementos dietéticos para la pérdida de peso y/o para mejorar las digestiones.

Se le atribuyen propiedades diuréticas y lipotrópicas (quema grasas) y se ha utilizado tradicionalmente por su probada acción colerética y colagoga (estimulante de la liberación biliar). Las hojas de alcachofa han demostrado aumentar la producción y la eliminación de bilis debido a la presencia de los derivados del ácido cafeico (cinarina principalmente). En personas con trastornos digestivos y hepatobiliares también se ha observado una disminución significativa de los síntomas de dispepsia (dolor abdominal, flatulencia, náuseas). 

2.5. Cafeína y polifenoles
Las xantinas (la cafeína es una de las más conocidas) y los polifenoles, son los componentes químicos mayoritarios de un grupo de plantas de uso habitual como son el café, el té, la yerba mate y el cacao.
En los últimos años se están asociando estas dos sustancias a un posible efecto activador de la termogénesis (aumento del gasto energético corporal) y por ello se están usando como ingredientes de complementos dietéticos para perder peso.
Diversos estudios explican que el mecanismo de acción de la cafeína y de los polifenoles es el de estimular el sistema nervioso central pudiendo promover la lipolísis (quema grasas) y la termogénesis, al aumentar el gasto energético, con efectos en la pérdida de masa grasa corporal y el aumento de la excreción de grasa fecal.

2.6. Calcio
El organismo humano contiene algo más de 1 kilo de calcio acumulado en los huesos y en los dientes, y cantidades mucho más pequeñas están distribuidas por la sangre y los distintos tejidos. La concentración de calcio en el organismo aumenta hasta el final de la época de crecimiento (hacia los 30 años). Posteriormente, el intercambio con el exterior sigue siendo intenso, y se produce una constante eliminación del mismo que debe ser repuesto a partir del calcio procedente de los alimentos (leche y derivados, sardinas en aceite y algunas verduras, frutos secos y legumbres, si bien calcio de los vegetales tiene menos biodisponiblidad para el organismo).
Tanto su carencia como su exceso son perjudiciales para la salud, ya que además de su papel en el desarrollo y mantenimiento óseo, participa en la coagulación sanguínea, en la correcta permeabilidad de las membranas y a su vez adquiere fundamental importancia como regulador nervioso y neuromuscular. Interviene en la contracción muscular, la absorción y secreción intestinal y la liberación de hormonas.
El mayor uso que se le da a los complementos alimenticios de calcio, tanto en la industria farmaceútica como la alimentaria, es la de servir de aporte extra para la salud ósea.
En su relación con el tratamiento del sobrepeso y la obesidad, diferentes estudios han encontrado una relación inversa entre la ingestión elevada de calcio y el peso corporal o la masa grasa. En estudios "in vitro" (realizados en el laboratorio), el calcio podría inhibir la lipogénesis (formación de grasa) y estimular la lipolisis (movilización de grasas), lo que produciría una disminución del almacenamiento de triglicéridos en los adipocitos (células del tejido adiposo o graso).

2.7. Té verde
El té verde (Camellia sinensis) se obtiene secando las hojas de la planta del té por acción del vapor (sistema japonés) o por el calentamiento (sistema chino). Estos procesos casi no alteran su composición química. Estas hojas no se dejan fermentar después de cosechado y antes del proceso de secado, para que retenga los ingredientes activos de la planta (polifenoles). Los polifenoles son esenciales en la fisiología de las plantas, para la pigmentación, crecimiento, reproducción y protección contra las plagas. Estos polifenoles del té verde, comúnmente llamados catequinas, son precisamente a los que se les atribuye la propiedad anti-obesidad de este tipo de té.
En la última década diversos estudios han sugerido que el extracto de té verde podría actuar de dos maneras en la pérdida de peso: acelerando el metabolismo y ayudando a la disminución de grasa corporal total.
Sobre todo en los últimos tres años se ha multiplicado la aparición de trabajos realizados desde prestigiosos centros de investigación, que han administrado té verde o sus extractos, a personas con normopeso o de peso normal o a personas con sobrepeso u obesidad y han estudiado sus efectos en su metabolismo y en el tejido adiposo. De este modo se ha superado el obstáculo de contar solamente con estudios "in vitro" (en el laboratorio) o "in vivo" en animales, que apoyaban la hipótesis de los efectos "termogénicos" (de aumentar el gasto energético) o "quema-grasas" de esta planta.

3. Aumentan el gasto energético
3.1. CLA, Ácido linoleico conjugado
Tonalin® es el nombre comercial del ácido linoléico conjugado (CLA, siglas en inglés), un ácido graso derivado del ácido linoléico poliinsaturado de la serie omega 6. El CLA se encuentra de forma natural en los aceites vegetales y en mayor proporción en alimentos de origen animal como los productos lácteos y la carne de rumiantes. En el ser humano las bacterias intestinales producen pequeñas cantidades de esta sustancia.
La atención comercial en el CLA tuvo su origen cuando algunos estudios realizados en ratones, mostraron que animales alimentados con suplementos de CLA reducían sustancialmente su masa grasa corporal.

3.2. Té verde
El té verde (Camellia sinensis) se obtiene secando las hojas de la planta del té por acción del vapor (sistema japonés) o por el calentamiento (sistema chino). Estos procesos casi no alteran su composición química. Estas hojas no se dejan fermentar después de cosechado y antes del proceso de secado, para que retenga los ingredientes activos de la planta (polifenoles). Los polifenoles son esenciales en la fisiología de las plantas, para la pigmentación, crecimiento, reproducción y protección contra las plagas. Estos polifenoles del té verde, comúnmente llamados catequinas, son precisamente a los que se les atribuye la propiedad anti-obesidad de este tipo de té.
En la última década diversos estudios han sugerido que el extracto de té verde podría actuar de dos maneras en la pérdida de peso: acelerando el metabolismo y ayudando a la disminución de grasa corporal total.
Sobre todo en los últimos tres años se ha multiplicado la aparición de trabajos realizados desde prestigiosos centros de investigación, que han administrado té verde o sus extractos, a personas con normopeso o de peso normal o a personas con sobrepeso u obesidad y han estudiado sus efectos en su metabolismo y en el tejido adiposo. De este modo se ha superado el obstáculo de contar solamente con estudios "in vitro" (en el laboratorio) o "in vivo" en animales, que apoyaban la hipótesis de los efectos "termogénicos" (de aumentar el gasto energético) o "quema-grasas" de esta planta.

3.3. Cafeína y polifenoles
Las xantinas (la cafeína es una de las más conocidas) y los polifenoles, son los componentes químicos mayoritarios de un grupo de plantas de uso habitual como son el café, el té, la yerba mate y el cacao.
En los últimos años se están asociando estas dos sustancias a un posible efecto activador de la termogénesis (aumento del gasto energético corporal) y por ello se están usando como ingredientes de complementos dietéticos para perder peso.
Diversos estudios explican que el mecanismo de acción de la cafeína y de los polifenoles es el de estimular el sistema nervioso central pudiendo promover la lipolísis (quema grasas) y la termogénesis, al aumentar el gasto energético, con efectos en la pérdida de masa grasa corporal y el aumento de la excreción de grasa fecal.

3.4. Fucus vesiculosus
El fucus (Fucus vesiculosus) es un alga parda que puede alcanzar los 30 y hasta 90 cm de longitud. La algina, una sustancia que tiene capacidad de absorber grandes cantidades de agua, alcanza entre el 18 y el 30% del peso seco del fucus. Además, esta alga es rica en manitol, un hidrato de carbono al que se le atribuyen propiedades laxantes y diuréticas. Su contenido en yodo es otro de los valores nutricionales por los que el fucus se emplea como complemento alimenticio.
Debido a su contenido en yodo se preconizó su uso como estimulante tiroideo en casos de bocio y como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso. Sin embargo, no está suficientemente documentada ni probada la posibilidad de aparición de efectos secundarios tras su consumo con este fin. Además, su consumo está contraindicado en caso de que se siga un tratamiento con hormonas tiroideas o con agentes antitiroideos, ansiedad, insomnio, taquicardia, hipertensión arterial y cardiopatías.

4. Diuréticos
4.1. Cola de caballo
La cola de caballo (Equisetum arvense) es una planta que por su composición y complemento alimenticio (saponósidos, taninos, flavonoides, alcaloides y sales minerales -sobre todo sílice y potasio- y vitamina C), se le atribuyen diversas acciones, entre ellas, diurética, remineralizante y cicatrizante.
Por su contenido en sílice y potasio, se revela como diurético, y ha estado indicada tradicionalmente en afecciones renales e inflamaciones de la vejiga urinaria y de la próstata, y para quienes tienen la necesidad de aumentar la cantidad de orina por tener tendencia a retener líquidos.
Un diurético es toda sustancia que al ser ingerida provoca una eliminación de agua y de sodio a través de la orina. Las plantas y los medicamentos con efectos diuréticos siempre se han de utilizar bajo la supervisión de un facultativo.

4.2. Extracto de alcachofa
Las hojas desecadas de la alcachofa (Cynara scolymus L.) se utilizan como ingrediente en suplementos dietéticos para la pérdida de peso y/o para mejorar las digestiones.

Se le atribuyen propiedades diuréticas y lipotrópicas (quema grasas) y se ha utilizado tradicionalmente por su probada acción colerética y colagoga (estimulante de la liberación biliar). Las hojas de alcachofa han demostrado aumentar la producción y la eliminación de bilis debido a la presencia de los derivados del ácido cafeico (cinarina principalmente). En personas con trastornos digestivos y hepatobiliares también se ha observado una disminución significativa de los síntomas de dispepsia (dolor abdominal, flatulencia, náuseas).

4.3 Té verde
El té verde (Camellia sinensis) se obtiene secando las hojas de la planta del té por acción del vapor (sistema japonés) o por el calentamiento (sistema chino). Estos procesos casi no alteran su composición química. Estas hojas no se dejan fermentar después de cosechado y antes del proceso de secado, para que retenga los ingredientes activos de la planta (polifenoles). Los polifenoles son esenciales en la fisiología de las plantas, para la pigmentación, crecimiento, reproducción y protección contra las plagas. Estos polifenoles del té verde, comúnmente llamados catequinas, son precisamente a los que se les atribuye la propiedad anti-obesidad de este tipo de té.
En la última década diversos estudios han sugerido que el extracto de té verde podría actuar de dos maneras en la pérdida de peso: acelerando el metabolismo y ayudando a la disminución de grasa corporal total.
Sobre todo en los últimos tres años se ha multiplicado la aparición de trabajos realizados desde prestigiosos centros de investigación, que han administrado té verde o sus extractos, a personas con normopeso o de peso normal o a personas con sobrepeso u obesidad y han estudiado sus efectos en su metabolismo y en el tejido adiposo. De este modo se ha superado el obstáculo de contar solamente con estudios "in vitro" (en el laboratorio) o "in vivo" en animales, que apoyaban la hipótesis de los efectos "termogénicos" (de aumentar el gasto energético) o "quema-grasas" de esta planta.

5. Laxantes  
5.1. Cáscara sagrada
La cáscara sagrada se obtiene de la corteza desecada de las ramas y del tronco del árbol Rhamnus prusiana D.C. La corteza se corta en pequeños trozos que se dejan secar durante al menos un año antes de usarla como planta medicinal. Se comercializa en forma líquida o en comprimidos.
La cáscara sagrada es una planta muy usada en medicina y en fitoterapia con fines laxantes, y pertenece al grupo de laxantes irritantes o catárticos debido a su contenido en glucósidos antraquinónicos. Estos compuestos no son activos de por sí, pero en el organismo liberan sustancias derivadas de la antraquinona, denominadas en general emodinas, las principales responsables del efecto laxante (a dosis bajas) o purgante (a dosis mayores) de la cáscara sagrada.
Su ingestión provoca la estimulación del sistema nervioso autónomo parasimpático en el intestino. Su acción directa sobre las paredes nerviosas del colon produce el consiguiente aumento de la motilidad intestinal y de la irritación de la mucosa intestinal.
Las indicaciones médicas para el uso de cáscara sagrada son muy limitadas por los efectos secundarios que provoca (diarrea, espasmos intestinales y dolores abdominales e intestinales), sobre todo si se administra de forma crónica, a dosis mayores de las aconsejadas o por la propia sensibilidad individual. Sus efectos comienzan a aparecer unas seis u ocho horas después de su administración oral. Se consume con demasiada ligereza como complemento alimenticio para tratar la indigestión en general y el estreñimiento en particular.

5.2. Glucomanano
El glucomanano es un polisacárido (hidrato de carbono complejo) no digerible que se extrae del tubérculo de una planta asiática llamada Amorphophallus konjac C. Koch. Se emplea el rizoma seco, triturado y purificado.
Este compuesto, al ser capaz de absorber agua formando un gel espeso, ingerido junto con abundante líquido, posee efecto saciante. Al tomarlo disminuye la sensación de estómago vacío y, por consiguiente, el apetito o la necesidad de comer.
Otra de las funciones que se le atribuyen es la de aumentar el volumen de las heces y conseguir así regular la función intestinal y evitar el estreñimiento, actuando como un laxante suave.

5.3. Fructooligosacáridos
Los fructooligosacáridos (FOS) son oligosacáridos naturales (fibra soluble) que contienen fructosa y que pertenecen a un grupo de compuestos que se conocen colectivamente como prebióticos.
Los FOS son derivados de otro oligosacárido, la inulina, y están presentes naturalmente en distintas clases de vegetales como el puerro, la cebolla, la achicoria (raíz), el espárrago, el ajo, la alcachofa, el tomate, la alfalfa, el plátano, etc. Para su comercialización se obtienen comúnmente de la raíz de la achicoria o por procesos sintéticos a partir de la remolacha azucarera.
Se les atribuye la propiedad potencial de mejorar la salud al promover el crecimiento selectivo de bacterias intestinales beneficiosas, las bifidobacterias y los lactobacilos.
Debido a que son un tipo de fibra, se han utilizado ampliamente para disminuir el tiempo de tránsito intestinal en caso de estreñimiento y para el mantenimiento de la flora beneficiosa del colon.
Existe numerosa información acerca de las acciones que ejercen sobre la salud provenientes de diferentes estudios con distinto nivel de evidencia científica, que aluden no solo a la mejora de la fisiología gastrointestinal, sino a acciones positivas en el sistema inmune, la biodisponibilidad de minerales, el metabolismo de las grasas y la carcinogénesis en el colon.

6. Saciantes o inhibidores del apetito
6.1. Glucomanano
El glucomanano es un polisacárido (hidrato de carbono complejo) no digerible que se extrae del tubérculo de una planta asiática llamada Amorphophallus konjac C. Koch. Se emplea el rizoma seco, triturado y purificado.
Este compuesto, al ser capaz de absorber agua formando un gel espeso, ingerido junto con abundante líquido, posee efecto saciante. Al tomarlo disminuye la sensación de estómago vacío y, por consiguiente, el apetito o la necesidad de comer.
Otra de las funciones que se le atribuyen es la de aumentar el volumen de las heces y conseguir así regular la función intestinal y evitar el estreñimiento, actuando como un laxante suave.

6.2. Fucus vesiculosus
El fucus (Fucus vesiculosus) es un alga parda que puede alcanzar los 30 y hasta 90 cm de longitud. La algina, una sustancia que tiene capacidad de absorber grandes cantidades de agua, alcanza entre el 18 y el 30% del peso seco del fucus. Además, esta alga es rica en manitol, un hidrato de carbono al que se le atribuyen propiedades laxantes y diuréticas. Su contenido en yodo es otro de los valores nutricionales por los que el fucus se emplea como complemento alimenticio.
Debido a su contenido en yodo se preconizó su uso como estimulante tiroideo en casos de bocio y como coadyuvante en el tratamiento del sobrepeso. Sin embargo, no está suficientemente documentada ni probada la posibilidad de aparición de efectos secundarios tras su consumo con este fin. Además, su consumo está contraindicado en caso de que se siga un tratamiento con hormonas tiroideas o con agentes antitiroideos, ansiedad, insomnio, taquicardia, hipertensión arterial y cardiopatías.

6.3. Nopal
Las especies de Opuntia (nopales, tunas o chumberas) son un género de plantas de la familia de las Cactáceas. Esta familia consta de más de 300 especies todas oriundas del continente americano, desde el norte de Estados Unidos hasta la Patagonia, donde viven silvestres. En España el nopal es popularmente conocido como chumbera.
Los nopales han sido y siguen siendo una fuente alimenticia en México desde hace cientos de años. Como vegetal se emplean en ensaladas, sopas, guisos y asados, y admiten multitud de preparaciones culinarias. La fruta se emplea principalmente para elaborar dulces y jaleas.
Del nopal se destaca su alto contenido en fibra, tanto soluble como insoluble, esta última más abundante. Precisamente su riqueza en fibra soluble (pectina, gomas y mucílagos) es la razón por la cual se le atribuye un efecto saciante y de disminución de la absorción de grasas a nivel intestinal.

6.4. Fructooligosacáridos
Los fructooligosacáridos (FOS) son oligosacáridos naturales (fibra soluble) que contienen fructosa y que pertenecen a un grupo de compuestos que se conocen colectivamente como prebióticos.
Los FOS son derivados de otro oligosacárido, la inulina, y están presentes naturalmente en distintas clases de vegetales como el puerro, la cebolla, la achicoria (raíz), el espárrago, el ajo, la alcachofa, el tomate, la alfalfa, el plátano, etc. Para su comercialización se obtienen comúnmente de la raíz de la achicoria o por procesos sintéticos a partir de la remolacha azucarera.
Se les atribuye la propiedad potencial de mejorar la salud al promover el crecimiento selectivo de bacterias intestinales beneficiosas, las bifidobacterias y los lactobacilos.
Debido a que son un tipo de fibra, se han utilizado ampliamente para disminuir el tiempo de tránsito intestinal en caso de estreñimiento y para el mantenimiento de la flora beneficiosa del colon.
Existe numerosa información acerca de las acciones que ejercen sobre la salud provenientes de diferentes estudios con distinto nivel de evidencia científica, que aluden no solo a la mejora de la fisiología gastrointestinal, sino a acciones positivas en el sistema inmune, la biodisponibilidad de minerales, el metabolismo de las grasas y la carcinogénesis en el colon.

CUERPO A CUERPO, CALLEJEROS









21 DIAS: MACHACANDO EL CUERPO















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